Gargantilla 'Honey' - Perlas con Amuleto de Abeja

• Gargantilla 'Honey' de Perlas con amuleto en forma de Abeja
  
• Collar de Plata de Ley 925 o de Plata de Ley 925 bañada en Oro de 18k.
  
• Piedra: Perla Natural de Río
  
• Tamaño de la perla: 3-4 mm
• Tamaño del colgante: 10x14mm
• Sistema de cierre: Mosquetón
• Longitud de la cadena: 36cm ampliable hasta 44cm

PROPIEDADES DE LA PERLA

La Perla es el símbolo de la amabilidad, la lealtad y la justicia. Absorbe la energía negativa y tranquiliza a la persona. Indica inocencia, pureza y modestia.

Las perlas se pueden usar de manera similar a los cristales y minerales con fines curativos y metafísicos.

Su energía es de naturaleza femenina, lo que significa que son herramientas útiles para usar si tiene un exceso de energía Yang o masculina.

Las perlas se pueden utilizar para acceder a la sabiduría de la Diosa en muchos rituales lunares y también en el trabajo de manifestación. Son muy equilibrados en su vibración, trayendo suavemente las energías del equilibrio y la armonía al aura y los cuerpos etéricos. 

En términos de curación física, las perlas se utilizan a menudo para tratar trastornos del tracto digestivo y tratar los problemas de la piel. Aumentan la fertilidad, ayudan a la maternidad y favorecen la lactancia.

SIMBOLISMO DE LA ABEJA

La abeja es símbolo de virtud, actividad y la constancia.

La abeja es un tótem o animal de poder que te protege y guía. En todas las culturas de la Antigüedad, la abeja siempre se ha relacionado con el trabajo muy laborioso. De hecho, la abeja es un insecto que se caracteriza por su constante trabajo.

su espíritu como animal de poder se relaciona con personas muy trabajadoras y, no solo eso, sino con personas que además de trabajar mucho están entregadas plenamente a la tarea que hacen.

Las personas que están protegidas por la abeja como su animal de poder se caracterizan por ser personas muy productivas, lo que también suele ir acompañado de un carácter ordenado y de una gran capacidad de organización, tanto a nivel personal como colectivo. Esto suele traducirse en forma de personas que llevan una vida próspera, tanto en el terreno económico y laboral como en todos los demás.

De hecho, la abeja se corresponde con uno de los animales totémicos que más beneficios ofrece a la persona que protege. Se trata de un animal trabajador y constante, lo que repercute al final en su propio beneficio y en el de la comunidad en el que se encuentra.